Sentimiento anquilosado
que irrumpe y enloquece.
Bajo la piel del presente
se oculta,
apolillada,
esta sensación que se presenta
y descontrola.
Encierro que enquista
el entusiasmo de estar
entusiasmado.
Ficción de una ficción
que se proyecta sin imágenes.
Historia de un tiempo sin personajes
que transita los caminos del olvido
Y ahí, el vacío, lleno de certezas
y de preguntas.
Con afiebrado deleite,
hago un pacto de vida
y me entrego –una vez más-
al hechizo.
Con júbilo me permito
este presente que narcotiza
las brumas del ayer
y transforma, con regocijo,
la realidad…
Embriagada y exorcizada
por la magia,
deliro con alcanzar y hacer mío
el elixir de la eternidad…
Y así –una vez más-
me encuentro haciendo conjuros,
para que esto transgreda,
los límites de la finitud…
